Ocurrió en el Juego de Estrellas de 2001
Por: Diario Libre
Santo Domingo, R.D. – El elegante gesto de Alex Rodríguez hacia la leyenda del béisbol Cal Ripken Jr. no salió tan bien como lo había planeado durante el Juego de Estrellas de 2001, reveló el martes durante el Juego de Estrellas de ese día.
«Derek (Jeter) y yo miramos hacia arriba, admirando, la razón por la que pude jugar el short, siendo tan alto… Solo quería, como fanático, tenerte una vez más en tu posición», dijo Rodríguez a Ripken en el programa de FOX previo al juego, haciendo referencia al momento de 2001.
En ese momento, Ripken parecía reacio a salir de la tercera base, un sentimiento que confirmó el martes.
«Ahora que lo mencionaste de nuevo, estaba un poco enojado contigo», dijo Ripken Jr. en unas declaraciones que recoge el New York Post. «Estaba como mirando, no había (jugado campocorto) en mucho tiempo. Tengo este gran guante en mi mano que llamaron enorme, dije, ‘¿cómo voy a volver allí, hacer un doble play?'»
Hace 22 años, Ripken Jr., que entonces tenía 40 años, disfrutaba de una parada en una gira triunfal de despedida en el Juego de Estrellas de 2001, y su asombrosa 19na vez que fue honrado en el Clásico de mitad de temporada al final de su carrera de 21 años.
Rodríguez, entonces una estrella de 25 años en el mejor momento de su carrera con los Vigilantes, estaba comenzando en la Liga Americana como campocorto, la posición que Ripken Jr. había jugado hasta 1997, cuando la edad lo obligó a moverse a la tercera base.
Junto con la insistencia del mánager All-Star de la Liga Americana, Joe Torre, Rodríguez le pidió a Ripken Jr. que cambiara de posición con él en el juego con la esperanza de honrar al veterano campocorto de los Orioles de Baltimore.
Se podía ver a Rodríguez lanzando la pelota por el infield antes de que se lanzara el primer lanzamiento, mirando al manager Torre en busca de la señal para ir a Ripken.
Después de que Rodríguez terminó de calentar, caminó hacia el «Ironman» del béisbol, quien pareció rechazar la oferta de la entonces superestrella de los Rangers.
Pero un pelotero, se entiende así, tiene que obedecer las órdenes de su mánager.
«Un gesto con clase de un hombre con clase», dijo el comentarista Joe Buck sobre Rodríguez. «Su idea. Cal Ripken peleó, pero finalmente se rindió cuando Torre dijo que se moviera» al shortstop.
