Por: EFE
El galardón recompensa a Mohammadi, que está en prisión en su país, «por su lucha contra la opresión de las mujeres en Irán y su lucha para promover los derechos humanos y la libertad para todos».
El comité noruego declaró que el premio «también reconoce a los cientos de miles de personas que se han manifestado contra las políticas de discriminación y opresión del régimen teocrático contra las mujeres».
La «valiente lucha» de Mohammadi, continuó el comité, «ha tenido enormes costos personales. El régimen iraní la arrestó 13 veces, la condenó cinco veces y la condenó a un total de 31 años de prisión y 154 latigazos. Mohammadi sigue en prisión».
Mohammadi, que está cumpliendo una condena de 16 años de cárcel en Evin, recibió este año el premio Guillermo Cano a la Libertad de Prensa de la Unesco y en 2022 ganó el Premio al Valor de Reporteros sin Fronteras (RSF).
Mohammadi, que ha trabajado durante años para diversas publicaciones, es también vicedirectora de la ONG Centro de Defensores de los Derechos Humanos en Teherán.
Incluso desde la cárcel, Mohammadi ha informado sobre la «lamentable» situación de los presos en Irán, ya que ha escrito decenas de artículos desde allí, y ha sido maltratada y torturada a pesar de sufrir problemas cardíacos, según destacó RSF cuando anunció su distinción.
El de la Paz es el quinto de los galardones anunciados hasta ahora, después de los de Medicina, Física, Química y Literatura, y sucede al otorgado en 2022 al bielorruso Ales Bialiatski y las organizaciones rusa Memorial y la ucraniana Center for Civil Liberties.