Por: PRENSA LATINA
SANTO DOMINGO.- El Gobierno de Haití aspira a proteger a las escuelas con el despliegue masivo de unidades especializadas de la policía en las inmediaciones de los centros de enseñanza.
Luego que varias instituciones privadas y públicas anunciaran la suspensión de las clases presenciales ante el aumento de la inseguridad y violencia de bandas, el Ministerio de Justicia solicitó a la Policía actuar con rapidez con vistas a restablecer un clima de seguridad que propicie la continuidad de las clases.
Al menos seis escuelas del centro de la ciudad informaron públicamente el cierre y algunas de ellas pasaron a la modalidad en línea.
La decisión se adoptó tras el secuestro de un padre y su hija, además de un profesor en las cercanías de instituciones docentes en esta capital.
Además, el Ministerio de Justicia confirmó que recibió informes sobre individuos que extorsionan escuelas, comercios y otras entidades y advirtió que los autores, coautores y cómplices de amenazas y secuestros serán perseguidos y castigados conforme a la ley.
La cartera también reconoció que la violencia actual es indiscriminada y no tiene precedentes y llamó a la resistencia de los ciudadanos.
La inseguridad que se disparó en Haití tras el asesinato del presidente Jovenel Moise a mediados de 2021, afecta particularmente la educación que ya sufría con los disturbios políticos, manifestaciones, crisis de los combustibles y recesión económica.
Además de las escuelas, al menos tres grandes hospitales cerraron o limitaron significativamente sus servicios ante el auge de la violencia y la cifra de raptos, asesinatos y enfrentamientos de las pandillas por el control territorial.
Es el caso de los centros Gheskio en la capital que atienden las enfermedades infecciosas, el nosocomio Albert Schweitzer en Artibonite que trata a más de 700 mil personas, y más recientemente el hospital de Médicos sin Fronteras en Cité Soleil.