Por: Almomento.Net
Estados Unidos derribó otro objeto volador no identificado que sobrevolaba su territorio. Con este son ya tres «ovnis» abatidos en tres días.
De forma octogonal y volando a unos 6.000 metros de altitud, según la prensa estadounidense, el artefacto fue derribado por un caza del ejército sobre el lago Hurón, al norte del país.
Estados Unidos ha ordenado el cierre temporal del espacio aéreo en esa zona tras el derribo.
Según el Departamento de Defensa del país, fue el presidente, Joe Biden, quien dió la orden de abatir el artefacto. Un F-16 de la Fuerza Aérea derribó a antes de las tres de la tarde del domingo. Por su parte, la oposición ha pedido al Gobierno más información sobre los sucesos de los últimos días.
Por el momento se desconoce si este, y los otros dos objetos, tienen origen chino, como lo tenía, supuestamente, el globo derribado la semana pasada. El Gobierno de Joe Biden ha acusado a China de haber desarrollado, con la implicación de las Fuerzas Armadas, un «programa» de globos para labores de espionaje y que ya han sobrevolado más de 40 países en 5 continentes.
China, por su parte, asegura que se trataba de un sistema de medición meteorológica que desvió su ruta por causas de fuerza mayor. El caso de los globos ha abierto una crisis diplomática entre las dos potencias, inmersas en una crisis diplomática desde el derribo del primer objeto.
No hay demasiada información del objeto derribado este domingo, como tapoco la hay de los otros dos. El líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, dijo este domingo que se cree que ambos eran globos, aunque más pequeños que el supuesto globo espía chino interceptado la semana pasada. Uno de los dos fue neutralizado el viernes en aguas de Alaska. Otro, en la región del Yukón, en territorio canadiense. Fue el primer ministro del país, Justin Trudeau, quien pidió a EE UU que derribase este segundo objeto.
Schumer, que fue informado sobre estos objetos por el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, afirmó que los artefactos volaban a 12.000 metros de altitud, suponiendo un «peligro» para la aviación comercial.
Sin embargo, en una comparecencia de prensa telefónica, la subsecretaria de Defensa y de asuntos Hemisféricos de EE.UU., Melissa Dalton, explicó que tanto el artefacto derribado el domingo sobre el Lago Hurón, en Michigan, como los dos anteriores en Canadá y en Alaska, fue abatido «por precaución», y recalcó que «no ha habido daños colaterales en ninguna de las operaciones de la última semana», según recoge la agencia Efe.
Según la misma agencia, la subsecretaria reconoció que es posible que haya muchos objetos sobrevolando el país cuyo propósito no sea dañino, como pueden ser artefactos para la «investigación legítima», pero como no se ha podido identificar ninguno de los abatidos estos días, el presidente decidió su derribo «por precaución».