Por: Amaury Mo
Pese a que las figuras más importantes en la industria de la tecnología llevan varias décadas trabajando en nuevos desarrollos con inteligencia artificial (IA), en los últimos meses miles de cibernautas han presenciado un ‘boom’ de novedosas plataformas que ofrecen diferentes servicios impulsados por las IA.
Esta tendencia ha permitido la aparición de nuevas plataformas digitales que son capaces de generar ilustraciones altamente realistas con base a una descripción textual que suministre el usuario, también han cobrado popularidad diferente chatbots, en especial ChatGPT, que pueden crear, resumir o traducir textos o resolver dudas sobre diversos temas y hasta dar consejos sobre romance, finanzas, cocina o turismo.
En el marco de esta situación Google decidió pisar el acelerador en el desarrollo de su inteligencia artificial y recientemente presentó de forma oficial a ‘Bard’, un ‘chatbot’ impulsado por IA que puede interactuar con los usuarios mediante mensajes de texto.
De manera que ese servicio opera con una dinámica muy similar a la de ChatGPT, puesto que el usuario interactúa con la IA mediante un esquema de preguntas y respuestas.
¿Cómo usar Bard, el “ChatGPT” de Google?
Vale la pena recordar que en el marco del evento Google I/O, realizado el pasado 10 de mayo, el gigante de la internet comenzó a habilitar el acceso a su nuevo servicio para el público general, por lo tanto, la IA de Bard puede ser utilizada en 180 países, (incluyendo Colombia).
Para acceder a este servicio, es necesario ingresar al sitio web oficial de la herramienta, para ello es necesario escribir en un buscador o navegador web la dirección ‘bard.google.com’. Posteriormente, el usuario deberá iniciar sesión con su cuenta personal de Google, a menos que haya ingresado desde Chrome con su cuenta activada, luego aparecerá una pequeña pestaña en donde habrá que pulsar el botón ‘Try Band’.
De inmediato, la plataforma generará una pequeña sub pantalla en donde mostrará los ‘términos y condiciones’ de su servicio, los cuales hay que leer y aceptar. Finalmente aparecerá un nuevo anuncio en donde se notifica que Bard aún se encuentra en una fase experimental y, por ello, es posible que ocurran errores con la IA.
Una vez superado ese proceso en pantalla, estará disponible un chat en donde el usuario podrá comenzar a interactuar con la inteligencia artificial de Google, a partir de las diferentes preguntas o solicitudes que desee realizar.
Sin embargo, hay que subrayar que, a pesar de que el modelo de lenguaje desarrollado por Google por ahora trabaja con 100 idiomas, actualmente la IA solo puede comprender preguntas que sean escritas en inglés, japonés y coreano.
Cuando el usuario proceda con una consulta en otro lenguaje, la inteligencia artificial emitirá un mensaje indicando que por ahora no cuenta con la capacidad de entender otros idiomas.
“Como LLM, estoy capacitado para comprender y responder solo a un subconjunto de idiomas en este momento y no puedo brindar asistencia con eso”, es el mensaje que genera la IA cuando se le hace una consulta en español.
Así las cosas, los usuarios que no dominen el inglés deberán acudir a la ayuda de herramientas como Google Traductor para poder construir textos en ese idioma y luego llevarlos al chat que tienen con ‘Bard’. De esta manera, la IA podrá comprender y resolver las preguntas del usuario sin problema alguno.
Cabe destacar que la plataforma cuenta con la opción de hacer consultas empleando audios, por lo que es posible enviar al chat una nota de voz (en inglés) con la consulta que se desea realizar.
Agregado a ello, los usuarios pueden usar los íconos de ‘pulgar arriba’ o ‘pulgar abajo’ para calificar la calidad de las respuestas que la IA ha generado, inclusive, pueden consultar directamente en Google algunos datos que el chatbot haya ofrecido, para así ampliar la búsqueda sobre un tema o asunto en concreto.
Por otra parte, es importante destacar que varios servicios de Google también han sido potenciados con una inteligencia artificial, de manera que eventualmente las plataformas de Gmail, Drive o Maps comenzarán a ofrecer nuevas funcionalidades enfocadas en facilitar la redacción de correos electrónicos, generar presentaciones o tablas dinámicas y determinar rutas más eficientes para movilizarse en una ciudad.